DIARIO
DE LECTURAS
Cada alumno debe ir realizando un diario de lecturas a
lo largo del curso.
Ese diario servirá para evaluar las
lecturas de libros elegidos por el propio alumno. Cada trimestre leeremos dos
obras: una la decide el profesor y será común para todos; la otra será elegida
por el alumno, aunque la debe aceptar el profesor.
El diario de lectura se debe
realizar, como su propio nombre indica, día a día, o al menos, ser constantes
en su redacción e ir realizando alguna entrada cada semana. De ninguna manera
se trataría de rellenarlo un día antes de que lo pida el profesor.
ESTRUCTURA
DEL DIARIO DE LECTURA
Se trataría de crear una entrada
cada vez que se leyera. Si en cada ocasión no se leen muchas páginas, se
podrían agrupar varios días en cada una de las entradas.
a)
ENTRADA INICIAL.
En la primera entrada, además de señalar la fecha de
comienzo, tendrías que señalar escuetamente estos datos.
Título.
Autor.
Editorial.
Nº
de páginas.
Después habría que explicar
brevemente por qué se ha elegido el libro y qué expectativas se tienen de él.
b)
El resto de entradas:
-
Fecha.
-
Número de páginas que has leído.
-
Relato resumido de lo que va ocurriendo. Todas las
entradas tendrían que si es posible estar relacionadas. El objetivo es crear un
texto con el que el lector del diario sepa de qué va el libro.
-
Opinión personal de lo que se va leyendo. No es
simplemente un “me gusta”, o “no me gusta”, sino explicar razonadamente que te
está atrayendo del libro o qué te está decepcionando o aburriendo.
-
Vocabulario de cada entrada. Este vocabulario también
se podría recopilar en la parte de atrás del diario.
c)
Entrada final del libro que te estés leyendo.
-
En unas 10 líneas como mínimo realiza una valoración
global del libro: partes más interesantes y más aburridas; personajes relevantes…
Observaciones:
El objetivo último es que te guste lo
que estás leyendo, así que si en algún momento no tienes ningún interés con esa
lectura siempre puedes abandonarla y comenzar con otro libro. En este caso
tendrías que indicar argumentar los
motivos que te han llevado a cambiar de libro. De cualquier forma, dadle siempre
una oportunidad a los libros: una lectura apasionante puede estar oculta tras
páginas en apariencia banales.
